He frenado un poco... obligadamente, el mundo está en crisis, Covid-19 ha llegado y yo aquí dejando vagar mi mente...
Pues tengo 30 años, soy mujer, soy esposa, hija, hermana, tía, tengo un título universitario, soy desempleada buscando trabajo y va y llega el fin del mundo. Excelente se completo mi bingo de buenas cosas... luego pienso en lo que he hecho en estos 30 años, estudiar, leer, vivir (algo pues me he puesto a pensar que no me he despeinado el pelo tanto como creía)
Y así... puff! Llega la crisis existencial, me planteo como he vivido, que me ha faltado, felicidad no. En ese plano he amado y amo, mi familia es mi pilar. Pero, si ahí viene el PERO... no soy económicamente independiente y tengo 30, no soy madre y tengo 30, no cumplo los estándares de mujer impuestos socialmente 😲
Y que hago ahora? Llego el Corona Virus y estoy recluida pensando y regodeandome en mi desgracia, pues bien para mi lo es... si no he llegado a ser esa profesional que me imaginaba a los 7 jugando con mi amiga Tamy cuando decíamos que seríamos abogadas, médicas y que nos llevaríamos el mundo por delante. Lo conquistaríamos y lo manejaríamos nosotras, seríamos poderosas y éxitosas.
Pues siento que la vida se me ha pasado en un segundo, eso si cuando me paro a pensar en cada momento vivido ha sido muchoooo no sé si a todos les interesará ese mucho, pero a mi me llena y mi crisis termina porque me ha llamado mi madre en crisis por la pandemia, que me abastezca de todo y no salga, que me quiere.
Y pienso en cuando era peque, las cosas vividas, el sol en la cara, la pile con amigos, las risas, la corrida porque nos perseguía una rata, si una Sra. RATA y no vivía en el campo, antes la ciudad era distinta, antes las preocupaciones eran otras.
Las preocupaciones de ayer de que tenía 30, título, sin trabajo y siendo mujer que aún no cumple lo establecido y esperado, quedaron de lado para pensar en el otro, otra, otre pues si me cuido y me quedo en casa - y ya que estamos me armo un blog para desahogar esto que no le digo a mi flia- cuido al de al lado, a mi familia, mis viejos, a mi vecina, porque nos cuidamos entre todos y eso es más importante que mi crisis existencial de los 30!
En próximas entradas hablaré un poco más de esta crisis treintañera y desocupada en cuarentena, de mi opinión hoy de algunas cosas y ya me importa poco si alguien lo lee a esto, pues solo es para dejar salir lo que llevo guardado y no puedo decirle a un psicólogo/a/e puesto que no tengo plata para eso y menos ahora con la CUARENTENA
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